lunes, 12 de enero de 2015

II Carrera Mushing Villa Los Arcos (por Petri)

La felicidad es un estado del que largamente hemos hablado esta semana en el curso que estoy haciendo de Inteligencia Emocional, y la imagen gráfica podría haber sido nuestras caritas al terminar la segunda etapa de la II Carrera Mushing Villa Los Arcos.

Esta carrera pertenece al Circuito Estatal de Media Distancia y se compone de dos etapas, sábado y domingo, de 25 kilómetros cada día, por el mismo recorrido y la opción de 13km para principiantes y canicross. El circuito se realizará con road book, además, la organización marca con balizas el recorrido, así que...¡imposible perderse! (eso era que todavía no nos conocían a nosotros jejeje).
Esta vez queríamos llegar con tiempo, así que, salimos el viernes por la tarde de Toledo. Pasando por Soria y pese a que era noche cerrada, los paisajes me dejaron alucinada. En el mes de febrero se celebrará por estos sitios la Soria Unlimited, carrera de mushing en nieve, y no faltaremos este año, como espectadores, claro!

Ya el sábado en Los Arcos, el ambiente empieza a tener el aroma de la Media Distacia, empiezan a llegar los equipos, 40 inscritos, ¡¡¡esto pinta muuuuuy bien!!! El que no conozca el circuito de Media Distancia, le diré que aquí uno se siente como en casa, que siempre aprende algo y que se disfruta cada segundo incluso cuando se está sufriendo.

La salida de la primera etapa era el sábado a las 4 de la tarde, pero en el musher meeting nos informan que se retrasará hasta las 5 debido a las altas temperaturas. Aprovechamos para hidratar bien a los perros, menos mal que nos hemos traído la harina de pollo, de GreenHeart, a Lía le cuesta mucho hidratarse, y con esta harina se bebe el caldo en "un plis".


Llegada la hora y en el arco de salida, Magda, del equipo Pas a Pas y Cris me hechan una mano para controlar a Lía, Antonio y Amorak han salido antes, y en estos casos ella se frustra y muerde la línea, así que su ayuda se agradece mucho. La salida la hicimos muy motivadas, pero, de vez en cuando Lía levantaba la cabeza y venteaba, así que me llevó los primeros kilómetros en una velocidad asíncrona, acelera-para-acelera-para. El firme era bueno, por una pista ancha flanqueada por invernaderos. Llegando a la altura de nuestro amigo Antonio Collado, que corre con sus dos malamutes Dakar y Ocean, cambio mentalmente mi estrategia de carrera, si Lía los equivoca con Ava y Amorak me amoldo a su ritmo y vamos con ellos. Pero esta vez Lía estaba siguiendo el olor, no las figuras peludas de sus dos compañeros, así que seguimos avanzando hasta "cazar a los nuestros". Todavía, durante la pista los equipos más rápidos (muuuucho más rápidos) comienzan a pasarnos. Empiezan los caminos con firme arcilloso, suave y con hierba y un contínuo sube-llanea sube-llanea que hace que la temida cuesta sea llevadera (casi me sale un pareado jeje). Aquí es donde disfruto, de verdad, del potencial de Lía, ya que con un poquito de mi ayuda somos capaces de subir las cuestas sin tener que echar pié a tierra..., ¡bueno! siempre y cuando Amorak no se pare o se quede atrás. Tras alcanzar la cumbre, comienza la bajada de cuestas ¡super rápidas y super divertidas! Amorak se lanza, y nosotras ¡detraaaaaaaaaas! Antonio dice que en estas bajadas con Lía se me pone una sonrisita, ¡¡¡¿¿¿qué vaaa!!!??? Alcanzamos a Ona y David, del club Pas a Pas, y hacemos con ellos los caminos que transcurren entre los pinos, y por pistas muy muy blanditas. También nos cruzamos con Nerea, compañera del club de Mushing Toledo, una tía muy dura, que se ha merendado las dos etapas de esta carrera.

En esta zona de pinos Amorak y Antonio se encuentran muy motivados y ponen distancia entre nosotros, y como Lía se encuentra agusto con el equipo de Ona y David recorremos varios kilómetros en su compañía. A partir del segundo automarcaje, nos quedamos más atrás, Lía se desorienta y pasamos tres kilómetros intentando encontrar nuestro propio ritmo. Pasada esta pequeña crisis, el chip mental de perro de tiro de Lía se enciende, y volvemos a formar pareja de mushing. Al llegar al tramo de los invernaderos, se me ocurre practicar un deporte al que el Presi  llama: ¿Se puede perder alguien en una recta...? sí, se puede..., jejejeje!!!!!

Finalmente, llegamos a meta con un ritmo alegre y con una sonrisa en la cara.

Tras la opípara cena en una sidrería de Los Arcos, y en la que estábamos todos pensando en meternos en el sobre, nos da un vuelco al corazón, al descubrir que una de las perritas de Ona, ha decidido irse de parranda al pueblo.  El sueño se nos quitó de golpe. Rápidamente salió gente en coche y con bicicletas para intentar localizarla... al final ella volvió por sus propias patas sana y salva.

La salida de la etapa del domingo se presentaba un poco compleja para mi, ya que salíamos antes que Antonio y Amorak y me daba que Lía no iba a querer salir sin ellos. Pero ¡no!, salí de la furgo antes q ellos para que Lía no los viese y pese a los aullidos desgarradores de Amorak, salimos con muy buen ritmo. Y así, al tran-tran fuimos comiéndonos kilómetros a la espera de que nos alcanzarán, algo que pasó, pero mucho más tarde de lo que pensaba, y ya los cuatro juntos completamos los 25 kilómetros con muy buen sabor de boca.

Terminada la carrera montamos el tan esperado chiringuito de Sueño Ártico/ Canadog para rematar con el fin de semana.

Cuando hablaba de felicidad al principio de esta entrada,  me refería a la sensación de bienestar al estar un fin de semana haciendo cosas que te gustan, con gente supermaja, eso es para nosotros la felicidad. ¡Lástima que haya que volver a la rutina!


Me ha encantado ver a nuestro amigo Balta de GreenHeart, la pena es que Carmen estaba malucha y no se pudo acercar, muchos besitos desde aquí. También estuvieron con nosotros la familia de Rosa Mary y Pícara, uno de los cachorrines de Ava y Amorak, ¡qué ganitas teníamos de verles! Y nos visitaron Begoña, su hijo y su perrita Maya, muchas gracias a los que os habéis desplazado hasta Los Arcos para vernos.

Desde aquí os invito a que nos acompañéis a los de Mushing Toledo  en nuestros periplos en cualquiera de las modalidades del mushing.


PD: Me gustaría dar las gracias al Club Navarmushing por la buena organización. Del detalle de la braga (de cuello) para todos los participantes, esos trofeos tan chulis tallados en madera y por los regalos de los patrocinadores  sorteados. Nos acordaremos intensamente de esta carrera mientras nos dure el jamón

FOTOS DE "PAS A PAS MUSHING"

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