martes, 22 de octubre de 2013

LA NOCTURNA DE TOLEDO 2013

Os dejo dos crónicas para que veáis como se vive la carrera desde puntos de vista diferentes.


Primero las damas

CRÓNICA DE LUCÍA

Según avanzan los días, y aunque estamos inscritos desde hace una semana (no recuerdo muy bien la fecha), no estoy muy convencida si va a ser posible correrla.

Estoy un poco en dejada en el mundo runing y no me encuentro mentalmente preparada para cuesta arriba cuesta abajo, pero una hora antes nos echamos "pa´lante" y decidimos correr.

Recojo a Pedro Martin Vargas...la hora esta muy pegada y casi en silencio hacemos el recorrido en coche. Objetivo: aparcar antes de que den la salida.

El equipo Mushing Toledo había quedado en Mcdonald´s a las ocho, pero ni por asomo llegamos.

Cuando llegamos intentamos localizar camisetas tuneadas con perro pero imposible, así que  decido ir a buscar un lugar en la salida donde el pelotón no fuera muy voluminoso, pero tampoco muy detrás con los rezagados.

Encuentro sitio. Pedro al ser su primera nocturna también se iba a agobiar con mucha gente a su alrededor, así que optamos por el centro del pelotón pero en un lateral.

Puffff... escopetazo de salida!!---- por el lateral izquierdo en todo momento vamos intentando no caernos porque con tanta gente era difícil...  y hasta la bajada del Alcazar no se empieza a difuminar la nebulosa de corredores. Ahí, sin darme cuenta, aprieto zapatilla y pierdo a Pedro por detrás. Intento localizarle, pero es imposible... me comen con tanto bullicio. Decido tirar y compruebo que estoy mucho mejor de lo que me esperaba.

Cuando me quiero dar cuenta ya  termina la calle Alfileritos y...zassss... "Luciaaaaaaaaaaaaaa!!!"... allí estaba mi hermanito con una reflex en el suelo. Uffff...siempre ahiiií.

No me puedo quitar de la cabeza como estará Pedro, así que aminoro el ritmo pero no puedo bajar demasiado porque si no decaería yo también. Sigo al tran tran y cuando finaliza la cuesta de San Juan de los Reyes y me meto en Santo Tomé , decido dar la vuelta y buscarlo, no lo veo ... uffffff. Al fin veo una camiseta de mushing.  Ahí esta!!! ... oleeee.

Un poco detrás de él visualizo al Máster y a Santiago, y comienzo a tirar de mi chico que por un momento se cree que no puede con ello.

A partir de ahí puedo decir que vi Toledo más calido que nunca. "Venga Pedro... esa cuesta y descansas... vamosss... ves ahí ibas a yoga...". Respuesta: "yo que seeeeeeeeeeeee" , jajajja ains

Última cuesta y zassss...  presi, cuñada y el resto del equipo de mushing gritando y animado, y Pedro se viene a arriba. Tanto que hasta piensa en parar a abrazarlos jajjajaja.

Nos metemos en calle Ancha y ... "venga Pedro esprint!!!!!!".  Contestación: "vengaaa ahí!!!".
Damos nuestros mejores pasos y... ¡¡¡metaaaa!!!... ¡¡¡¡conseguido !!!!.

A poca distancia llegaron el Máster y Santiago, el cual venía un poco sofocado pero genial.

Sensaciones formidables, muy buenas. Anímicamente muy bien. Vi Toledo grande y glorioso.

Familia perruna, gracias por darme cada aliento.


CRÓNICA DE SANTIAGO

Crónica de La Nocturna de Toledo 2013, por Santiago Y. Kira

Un año más el atletismo toledano se ha vestido de gala para celebrar un gran evento deportivo, la Nocturna de Toledo, carrera a beneficio de la Fundación Niemann Picq, que este año ha cumplido su sexta edición. Como siempre ha sido un éxito de participación, con mil quinientos corredores, que han acudido a la llamada de la Asociación de Vecinos “La Mezquita” para disfrutar de Toledo en su estado puro. Y como no, entre el gran pelotón se distinguían un grupo de camisetas de color naranja con el distintivo del Club de Mushing Toledo, que aportaban la nota de color en la inmensa marea blanca.

Personalmente acudía a esta cita con la única intención de intentar acabar la carrera,  ya que no estoy recuperado de la fascitis plantar que me tiene ya más de tres meses sin correr, pero las ganas de correr esta carrera, que me encanta, la oportunidad de estrenar la nueva camiseta del club y la promesa del Master de ir conmigo a ritmo suave, me animaron a tomar la salida.

Con estas premisas nos presentamos el Master y yo en Zocodover, donde habíamos quedado con Miguel, que quería hacer la carrera con nosotros, aunque como lleva poco tiempo entrenando tenía dudas sobre sus posibilidades de acabar bien.

Una vez reunidos los tres nos dirigimos a la zona de salida, donde nos encontramos a Antonio Fernández, que también tomaba parte en la carrera. En ese periodo en que estábamos esperando a que se diese la salida una chica nos preguntó qué era eso del Mushing que ponía nuestra camiseta, y como la moza estaba de buen ver, nos volcamos en explicaciones y casi la convencemos para que se compre un perro y se apunte al club.

En estas estábamos cuando, con algo de retraso, se dio la salida. Por fin volvía a correr, y  aunque tenía alguna molestia en el pie, las sensaciones de volver a estar en una carrera compensaban todos los dolores de los últimos meses. Como siempre en esta carrera, la cantidad de corredores y la acusada primera curva a la derecha nos hizo arrancar despacio, en la zona trasera del pelotón, pero pronto empezamos a adelantar  a gente que en las primeras cuestas empezaba a sufrir.

En la subida al Alcázar nos encontramos a Luis Juzgado, que al final se animó a participar con un amigo. Con él ya éramos 5 miembros del club en carrera. Tras unos instantes con Luis, continuamos nuestra remontada, incrementando el ritmo poco a poco, adelantando corredores y, sobretodo disfrutando de la magnífica sensación de correr por un entorno tan espectacular como son las estrechas calles del casco histórico de Toledo.

Al paso por Zocodover escuhamos los primeros gritos de ánimo destinados a nosotros: Alberto y sus chicas  estaban allí mostrándonos su apoyo. Seguimos los tres en cuadrilla, corriendo bien, con un ritmo algo más vivo de lo que yo esperaba, pero los tres íbamos cómodos y seguimos adelantando gente enfilando ya Alfileritos, para llegar a la Plaza de San Vicente. Allí estaba el grueso de nuestro público, cuyas voces se alzaron por encima de los otros miles (o quizá cientos de miles) de espectadores de la carrera, para hacernos llegar su ánimo y apoyo.

La bajada de la Calle Real nos permitió recuperar un poco el ritmo de la respiración y encarar con fuerza la subida a San Juan de los Reyes. A partir de aquí Miguel empezó a sufrir un poco en las subidas, pero recuperaba bien en las bajadas, con lo que pudo seguir corriendo en el grupo un buen rato más.

El Máster iba pletórico, se nota que está pasando un buen momento de forma, permitiéndose en lujo de quedarse un poco retrasado apoyando a Miguel y después recuperar rápidamente para alcanzarme y correr conmigo, lo que me vino muy bien en la última parte de la carrera, pues acusé los meses de inactividad y sufrí más de la cuenta en las últimas cuestas.

En el tramo final de la carrera nos empezó a llover, pero con lo poco que faltaba no podíamos parar en boxes a poner neumáticos de mojado, así que seguimos con las gomas de seco, trazando las curvas con mucho cuidado, cuando de pronto, al hacer el segundo paso por la plaza de San Vicente,  volvieron a resonar los vítores y ánimos de nuestro público, que nos llevaron en volandas a enfilar la calle de la Plata, última recta antes de entrar en la zona de meta.

Todavía estábamos el Máster y yo entregando el chip, cuando Miguel cruzó la línea de meta completando una magnifica carrera. Poco después, recogiendo la lata de bebida isotónica que entregaba la organización vimos en la fila, un poco por delante de nosotros, otra camiseta del club. Era Pedro Martín que, con una fuerza de voluntad envidiable y superando su falta de continuidad en los entrenamientos, completó una carrera espectacular; aunque la sorpresa llegó poco después, cuando nos encontramos con  Lucia Bermúdez que había llegado a meta mucho antes que todos nosotros, con un ritmo de carrera digno de una campeona.

Finalmente, por whatsapp nos enteramos que muy por delante de todos nosotros, con un ritmo infernal, Miguel Ángel Galán fue el primer representante del club en cruzar la línea de meta completando un auténtico “carrerón” (si Ángel Nieto me permite emplear la expresión).
En resumen, estupenda representación del Club Mushing Toledo en esta cita anual, que nos ha permitido pasar una tarde-noche genial, unos disfrutando de la mejor carrera de Toledo (al menos para mi gusto) y otros apoyando y animando.


Solo me queda felicitar a la organización que un año más ha demostrado que con ganas, ilusión y buena voluntad se pueden hacer las cosas muy bien.

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