Monttrail Los Yébenes 2015

Hora de salida. 7.00 a.m.

Mientras que esperamos en el parking de Safont a que llegue Fernando, vemos a los chavalines volver a casa después de una noche de farra y destriporre.... y nosotros ahí... vestidos como si fuéramos a correr la Transvulcania. Una escena muy deprimente si no fuera porque nos lo pasamos pipa. Bueno, a decir verdad Manolo venía con cara de perro. 

Llegamos a Los Yébenes. Somos casi los primeros en recoger los dorsales. Poco a poco van apareciendo el resto de miembros de la manada naranja. Muchas caras conocidas entre el resto del pelotón y un bonito minuto de silencio que servía de preludio para el pistoletazo.

La tranquilidad con la que la gente hace los primeros metros (todavía llanos) hace presagiar que lo que se nos viene encima va a ser durillo.... y así es. Apenas transcurridos 500 mts aparece la que para mí es la cuesta más dura de todo el recorrido. Rubén va colocado entre los primeros. Alejandro, Fernando y Jesús también ... la gente camina, Máster y Yayo se me escapan, Ana y Manuel también van bastante por delante. Miro para atrás y veo a Deli, María y Petri. Las más duras del oeste. 

Llegamos a la Ermita y aparece Irene... sigilosa... sonriente... y corriendo con muuuucha cabeza y con una mochila de hidratación que no la funcionaba. Gran evolución la de esta chica esta temporada. 

Comienza la subida a Los Molinos, tramo empedrado donde es aconsejable correr por el borde. Se va empinando poco a poco y al final toca poner pie a tierra y volver a caminar. Oigo una voz familiar dando ánimos a otros corredores... pero coño!... si es María "Sulti". Llego al avituallamiento con ella pegada al culo, iniciamos el sube y baja... y de pronto, en el desvío que separaba a los de 6 de los de 14 y 21, me adelanta. Jooooder, cómo va ésta!. Decido hacer mi propia carrera y comprobar si no pierdo mucha distancia con ella, que es una magnifica andadora, en las subidas en las que hay caminar. Lo de andar es mi talón de Aquiles. Me adelanta todo el mundo. 

Más tarde sabríamos que el Perru (Antonio) habría tomado el desvío de 6 porque le habían aparecido unas molestias en sus gemelos. Aún así estamos muy orgullosos de nuestro "perruquero" más dicharachero. 

Consigo mantener la distancia con María y en la penúltima cuestarraca la pillo. Intenta envenenarme con un brebaje muy raro que lleva, pero no acepto. 

Llegamos así a las antenas, bebemos, comemos e iniciamos la cuesta abajo. Al principio por un camino ancho que tras un brusco giro se transforma en un sendero bastante técnico. Cuando llevamos 1 km de bajada nos pasa el primero de los 21 kms. Vaya liebre!. No pasa nada, nosotros a lo nuestro.

Hace mucho calor (30ºC por lo menos). Dejamos el sendero y empezamos la pista ancha. María me da vía libre para que tire. Empiezo a pensar que de un momento a otro me va a pasar Rubén. La cuesta abajo tan esperada resulta no ser tan cuesta abajo... o quizás es que ya nos pesan las piernas. 

Entramos en el pueblo y los voluntarios me saludan al grito de "mira!.. otro de Mushing!!, vaaaaamosss campeones!".  Parece una tontería, pero eso me ha hecho ilusión jejeje.

Callejeamos un poco, cuesta abajo y.... METAAA!!!!. Allí estaba Yayo dando ánimos como loca en la misma línea de llegada. Así da gusto.

A los 2 minutos llega María (14 kms), y un pelín después el increíble Rubén (a falta de ver clasificaciones creemos que ha sido 10º de su categoria - 21 kms- Senior Masc). 

Además del Perru y de Yayo, cuando yo llego a meta allí estaban ya:

- Ana e Irene que me cuentan su proeza: 4as en sus respectivas categorías. Estas dos son de otra pasta.

- Manolo pletórico con su carrera, bajando 7 minutos su marca. Tengo que decir que por la mañana le anticipé que iba a hacerlo muy bien, pero no me creyó mucho. 

- Máster, que ha hecho una carrera con mucha sabiduría y que ha contado con el apoyo psicológico de súperyayo.

Las tres más duras del Oeste aparecen dando voces y cantando de alegría. Deli, María (bloom) y Petri se han ido dando ánimos unas a otras durante toda la carrera y han podido completar los 14 kms de muy buena forma.

Pasa el tiempo y aparece también Fernando (21 kms) con un tiempazo del copón y muuuuuy contento. No es para menos. 

Alejandro (21 kms) también se planta en meta con una muy buena marca a pesar de haberse perdido y todo.

Y por último, y sufriendo los efectos de la alergia, llega Jesús (21 kms). Hoy ha hecho un esfuerzo increíble para poder llegar a meta y además lo ha hecho en un muy buen tiempo. Es un crack.

Una vez que ya estaba toda la manada agrupada de nuevo nos disponemos a la dura tarea de elegir sitio para degustar las viandas que cada uno ha traído. Optamos por situarnos en la misma plaza donde se van a entregar los premios. La gente nos mira raro cuando empiezan a aparecer empanadas, melón, bizcochos, carcamusas, magdalenas, gazpacho, ensaladas de pasta.... Vamos, que no nos hemos quedado con hambre. 

Conclusión: Otra gran carrera en manada y una copiosa comida para recuperar rápidamente las fuerza y seguir dando guerrita.